Oct23
Mi adoración
Mes // Octubre
¿Alguna vez te han ofrecido un reloj o un bolígrafo de marca que resultó ser falso o robado? Esa misma intención tenía Satanás con Jesús: ofrecerle lo que no era suyo.
Frecuentemente olvidamos que la búsqueda del éxito y del poder puede convertirse en una obsesión que nos atrapa y nos aleja de lo que verdaderamente nos hace felices. Por ello, nunca debes olvidar la fuente de tu verdadera realización:
«Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: 'Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás'. El diablo entonces lo dejó; y he aquí vinieron ángeles y lo servían.» - Mateo 4:10-11 RVR60
La adoración es el reconocimiento de quién es Dios y de quién eres tú en relación con Él:
«Esto dice el Señor: 'El cielo es mi trono y la tierra el estrado de mis pies. ¿Acaso podrían construirme un templo tan grandioso? ¿Podrían edificar un lugar así para mí? Con mis manos hice tanto el cielo como la tierra y todo lo que en ellos hay. ¡Yo, el Señor, lo he decretado! Bendeciré a aquellos con corazón humilde y arrepentido, a quienes tiemblan ante mi palabra.'» - Isaías 66:1-2 NTV
Oración
Padre amado, hoy reconozco que me he dejado engañar, creyendo que sería feliz al buscar el reconocimiento y la admiración de otros. Gracias por recordarme que lo que realmente vale la pena en la vida, solo Tú puedes brindármelo.
Lectura bíblica recomendada: 1 Timoteo 6 Frecuentemente olvidamos que la búsqueda del éxito y del poder puede convertirse en una obsesión que nos atrapa y nos aleja de lo que verdaderamente nos hace felices. Por ello, nunca debes olvidar la fuente de tu verdadera realización:
«Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: 'Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás'. El diablo entonces lo dejó; y he aquí vinieron ángeles y lo servían.» - Mateo 4:10-11 RVR60
La adoración es el reconocimiento de quién es Dios y de quién eres tú en relación con Él:
«Esto dice el Señor: 'El cielo es mi trono y la tierra el estrado de mis pies. ¿Acaso podrían construirme un templo tan grandioso? ¿Podrían edificar un lugar así para mí? Con mis manos hice tanto el cielo como la tierra y todo lo que en ellos hay. ¡Yo, el Señor, lo he decretado! Bendeciré a aquellos con corazón humilde y arrepentido, a quienes tiemblan ante mi palabra.'» - Isaías 66:1-2 NTV
Oración
Padre amado, hoy reconozco que me he dejado engañar, creyendo que sería feliz al buscar el reconocimiento y la admiración de otros. Gracias por recordarme que lo que realmente vale la pena en la vida, solo Tú puedes brindármelo.