Identificando el Agotamiento

El agotamiento y el estrés, resultado de constantes preocupaciones, son rasgos distintivos de la actualidad. ¿Cómo saber si estás agotado?

• * Te sientes débil y exhausto durante las tareas cotidianas: "Estoy agotado y agobiado; mi corazón gime desesperado." - Salmos 38:8 NBD
• * Te desesperas porque tu trabajo no produce frutos: "Ustedes siembran mucho y cosechan poco, comen y no sacian su hambre, beben y no sacian su sed, se abrigan y aún tienen frío, y el sueldo que reciben no les alcanza para sus necesidades." - Hageo 1:6 TLA
• * Realizas un balance negativo de tu vida: "Dios mío, ¡sálvame, pues siento que me ahogo! ¡Siento que me hundo en el barro y no tengo dónde apoyarme! ¡Me encuentro en aguas profundas, luchando contra la corriente!" - Salmos 69:1‭-‬2 TLA
• * Sientes amargura hacia Dios: "Cansado estoy de pedir ayuda; tengo la garganta seca. Mis ojos se cierran de fatiga mientras espero tu auxilio. ¡Tengo más enemigos que cabellos en la cabeza! Muchos me odian sin razón, y quieren matarme; me exigen que devuelva lo que nunca les he robado." - Salmos 69:3‭-‬4 TLA

¿Qué dice Dios al respecto?

• 1) Las angustias y problemas suelen ser el resultado de creencias erróneas acerca de uno mismo y del entorno. Busca la fuente de la verdad y encontrarás restauración: "Amado, deseo que te vaya bien en todos tus asuntos y que tengas salud, así como prospera tu alma. Me alegré mucho cuando los hermanos vinieron y testificaron acerca de tu fidelidad a la verdad, de cómo vives según la verdad. No hay mayor gozo para mí que escuchar que mis hijos viven conforme a la verdad." - 3 Juan 1:2‭-‬4 RVR1960
• 2) Convierte a Jesús en tu aliado diario: "Vengan a mí todos los que están cansados y cargados, y yo les daré descanso. Tomen mi yugo sobre ustedes y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón, y hallarán descanso para sus almas. Porque mi yugo es fácil y mi carga ligera." - Mateo 11:28‭-‬30 NVI

Oración

Padre Celestial, acudimos a ti en momentos de debilidad y cansancio, buscando la paz que sólo tú puedes ofrecer. Danos la sabiduría para discernir la verdad en medio de la confusión de este mundo y la fortaleza para llevar nuestras cargas diarias. Ayúdanos a recordar que en ti encontramos descanso y que, al confiar en tu palabra, nuestro espíritu se renueva. En el nombre de Jesús, Amén.